¿Conocéis las ventajas de clorar la piscina con sal?
Mediante la instalación de un clorador salino que convierte la sal en cloro, ya no es necesario realizarlo con las pastillas de cloro habituales. Con ello conseguimos un agua de piscina que no reseca la piel, no irrita los ojos y evita el sabor y olor habitual de la piscina. Además de realizarlo de una manera ecológica: únicamente usando sal marina. El sistema se controla a través de un sencillo equipo.